La disfasia expresiva, también conocido como trastorno del lenguaje expresivo, implica una dificultad para la adquisición del lenguaje, caracterizada por un impedimento para expresar las ideas aunque se puedan comprender.
La disfasia expresiva es una afección psicológica que resulta heterogénea y significativa, donde están implicadas alteraciones de diferentes componentes del lenguaje comprensivo y expresivo. En este sentido, es inherente a factores fonológicos, léxicos, morfosintácticos, los cuáles se encuentran en un nivel de desarrollo por debajo de lo esperado para la edad cronológica del niño. Por lo tanto, se produce un retraso del aprendizaje de al menos dos años, que además involucra otra áreas escolares que tienen que ver con la comunicación y la interacción social, que no pueden ser explicadas por otros déficits sensoriales, motores o intelectuales. Así, tampoco responden a factores socioculturales, sino que vienen dados por una afección en la comprensión del lenguaje que dificulta el resto de los procesos de aprendizaje a temprana edad.
Diagnostico
La identificación y diagnóstico de la disfasia expresiva, suele ser compleja ya que incluye el análisis de criterios cuantitativos y cualitativos, inherentes a las necesidades educativas especiales, donde es posible que se presente comorbilidad con los diferentes trastornos del aprendizaje.
El Manual Diagnóstico de los trastorno mentales DSM-V caracteriza a disfasia expresiva, como aquel en donde el niño presenta una capacidad de expresión del lenguaje oral inferior al nivel esperado para su edad, sin embargo, presentan unos valores normales en la comprensión del lenguaje. A diferencia del trastorno del Lenguaje Receptivo-Expresivo, donde si existe un desempeño del lenguaje tanto a nivel expresivo como comprensivo, que denota aún más el deterioro del proceso de adquisición de esta función cognitiva.
Lo esperado en el desarrollo evolutivo de los bebés y los niños, es un desenvolvimiento natural que comienza desde el nacimiento, donde se va desarrollando el lenguaje, y adquiriendo la capacidad de escuchar, ver, recordar y comprender la información que brinda el entorno. Se estima que 1 de cada 20 niños presenta trastorno de lenguaje; en caso de desconocer las causas se denomina trastorno del desarrollo del lenguaje.
Los problemas lingüísticos comienzan antes de los 4 años de edad, en algunos casos debido a lesiones cerebrales, que posteriormente se diagnostican de forma errónea como trastornos del desarrollo. En este sentido, los trastornos del lenguaje pueden estar presentes en otros diagnósticos como el de espectro autista, la pérdida de la audición, entre otras dificultades del aprendizaje. También se debe a daños en el sistema nervioso central que se denomina afasia.
Los trastornos del lenguaje no se deben a cocientes de inteligencia bajos, sino que son dificultades que impiden el desarrollo del óptimo de las habilidades lingüísticas, que limitan un desempeño óptimo del habla, que dependiendo de cada caso afectan algunas habilidades u otras.
Existen dos tipos.
- Disfasia verbal, que se caracteriza por un lenguaje poco fluido.
- Alteración fonológica, sería una inadecuada articulación dentro de las palabras o frases.
Sintomas
Algunos de los síntomas de la disfasia expresiva se pueden determinar de la siguiente manera:
- Comienzo tardío: Cuando se sospecha de problemas en la adquisición del lenguaje los niños demoran para decir sus primeras palabras así como en aprender nuevos vocabularios.
- Problemas para encontrar palabras: Este síntoma implica una dificultad para acceder a las palabras, en comparación con los niños de su misma edad, a pesar de que puedan entenderlos. Adicionalmente, utilizan palabras no específicas como “esos”, “cosa”, que se evidencia en base a una dificultad para encontrar la palabra adecuada para nombrar algo, generando un sentimiento de frustración.
- Problemas para contar historias: Se ha evidenciado una dificultad en los niños con disfasia expresiva para contar de manera lógica y fluida sus experiencias, ya que sus historias carecen de detalles o coherencia en los hechos que relatan.
- Omisiones de sufijos, prefijos o errores gramaticales: Se presenta una dificultad para ordenar bien las frases, con una gramática deficiente. Esto se puede observar en la omisión de sufijos, prefijos, pronombres, preposiciones o artículos. Por lo tanto, en la edad escolar este problema se confunde con falta de interés o motivación, cuando los síntomas se deben al trastorno expresivo del lenguaje
Tratamiento
Es importante mencionar que la disfasia expresiva, puede aparecer en distintos niveles de gravedad o intensidad, afectando problemas fonológicos o del procesamiento de elementos de la memorización. Para atender esta afección se acude a las terapias del lenguaje, donde se busca ir incrementando el vocabulario que utiliza el niño, mediante técnicas especializadas.
El pronóstico de la disfasia expresiva puede ser positivo, siempre y cuando se realice una intervención idonea. La intervención tiene que tener muy en cuenta el desarrollo neurológico y psicológico del menor, y debería de ser imprementada por profesionales, los cuáles deben contar con la implicación de los familia y lcentro docente del menor. La intervención será multidisciplinar. Deberá de ejecutarse lo más precoz posible, con la finalidad de limitar al máximo el impacto en el adecuado desarrollo escolar.
Destacar que resulta de vital importancia como hemos mencionado anteriormente que la terapia incluye la participación y compromiso del núcleo familiar y escolar, para monitorear la evolución y hacer seguimiento en casa, en función de lograr solución del déficit y encaminar hacia el óptimo desarrollo del niño, para lograr un aprendizaje acorde a su edad y garantizar las bases para su buena evolución escolar.